Enfermedad de Alzheimer

En las últimas décadas, se ha producido un aumento muy importante en el número de casos de enfermedad de Alzheimer, el tipo más frecuente de demencia y una de las principales causas de discapacidad y dependencia entre las personas mayores, llegando a considerarse en la actualidad como una epidemia silenciosa, en la mayor parte de las regiones del mundo.

Al día de hoy, no existe una cura para la enfermedad, aunque se han logrado avances significativos en la comprensión de sus causas y se han desarrollado estrategias psicoterapéuticas y medicamentos que permiten ayudar a controlar o retrasar los progresión de la enfermedad durante algún tiempo, especialmente en las primeras etapas del trastorno.

Manifestaciones tempranas

Entre las manifestaciones tempranas de enfermedad de Alzheimer se incluyen:

  • Desorientación en tiempo y espacio

  • Alteraciones de memoria reciente, incluyendo nombres de personas, fechas o eventos importantes, nombres de personas o información nueva.

  • Dificultad para la planeación de actividades o la resolución de problemas cotidianos.

  • Dificultades con el uso del lenguaje, problemas para seguir conversaciones o participar en ellas, repetición u olvido de términos o frases.

  • Alteración de la capacidad de razonamiento y problemas para la toma de decisiones.

  • Limitaciones para el desarrollo de las actividades cotidianas y pérdida de la independencia.

  • Cambios en el humor o el estado de ánimo, tendencia a la depresión, sensación de ansiedad y reacciones inadecuadas frente a estímulos cotidianos.

Recomendaciones

Entre las acciones recomendadas para el cuidado del paciente con enfermedad de Alzheimer se incluyen:

  • Informarse de las características y del posible curso de evolución de las demencias.

  • No intentar hacer razonar al paciente, recordar que la pérdida de la capacidad de raciocinio es un síntoma y no un capricho del paciente.

  • Aprender a definir y respetar espacios de descanso y entender que son necesarios para mantener una buena salud física y mental del cuidador.

  • Pedir ayuda cada vez que sea necesario y permitirse espacios para manifestar sus quejas respecto a las dificultades encontradas en el cuidado.

  • Recordar que la demencia es un proceso que tiene diferentes etapas, no anticipar ninguna y vivir el momento lo mejor que pueda.

  • No enmarcar su caso en historias de otros pacientes, cada persona es diferente y muchas complicaciones se derivan de un mal manejo.

  • Recordar que la esfera emocional de los pacientes con demencia suele estar conservada mucho más tiempo que la intelectual y cuidar su relación desde ese punto de vista.

Referencia

  1. Morales Ruiz JC. Enfermedad de Alzheimer: Una epidemia en ciernes. Universidad de Ciencias Aplicadas y Ambientales. Facultad de Medicina. 2014.
  2. 10 señales de advertencia acerca de la enfermedad de Alzheimer. Asociación Americana de Alzheimer. Disponible en internet en: https://www.alz.org/national/documents/sp_brochure_10warnsigns.pdf
  3. Palacios V. Decálogo del cuidador. Portal Actualidad en Alzheimer. Disponible en internet en:

http://actualidadenalzheimer.blogspot.com/2014/01/decalogo-del-cuidador.html